A raíz de la difusión que ha tenido el tema de #CaravanaMigrante, en los últimos días, hay quienes sin comprender lo que dicen, argumentan que la Migración de Centro América, hacia Estados Unidos, forma parte de los planes de Sociedad Abierta de Soros.

El problema, es que la generación actual lee titulares pero no revisa contextos o no profundiza en el análisis.

Soros, es un liberal radical. Un neo - liberal en lo cultural. Su preocupación, es que el Capitalismo entre en crisis y se diluyan las libertades individuales. Por eso, a Soros le interesa fomentar la libertad del individuo por sobre la relación comunitaria.

Soros no es un "comunista millonario" que quiera el triunfo del proletariado. Soros no es un adalid de la justicia social. Menos, por cierto, tiene que ver con "iluminatis" o "anunakis".

En su visión del triunfo de lo Individual, está la decisión de uno, por sobre la construcción de una Comunidad.

Por eso, su impulso a posturas controvertidas como el aborto, la agenda lgtb, la democracia ciudadana - representativa, el uso de la mariguana y drogas en general como ejercicio del derecho al ocio, entre otras.

¿Porqué entonces un sector de la izquierda lo apoya?

Pues porque hay una izquierda liberal. Es decir, no social. Le interesa una política benévola de parte del Estado. Pero hasta ahí.

Otro punto, que viene al tema, es sobre la migración musulmana a Europa. ¿Realmente le interesa a Soros? Sí. El ve la migración musulmana como la fuente de mano de obra barata y jóven, en un continente que envejece y se disminuye.

Sin mano de obra que genere recursos, sin "ejército de reserva industrial", las pensiones, los trabajos menos pagados, entrarían en crisis y el capitalismo se hundiría.

¿Porqué musulmanes? Porque no tienen identidad europea. Porque su cosmovisión, en teoría, les hace sumisos al trabajo pesado.

Sin embargo, la migración musullmana - africana - medio oriente no corresponde solo a ello. Hay otros factores.

Arabia Saudita, Qatar, los emiratos del Golfo, incentivan la migración como un proceso de recuperación / conquista de Europa.

¿Exageramos? No. No lo hacemos. Es parte de la ideología wahabbí. Esta ideología, es una especie de Stalinismo dentro del universo islámico sunnita. Es la oda a un Califato restaurado. Que recupere los territorios antaño colonizados por el Islam guerrero medieval.

Contra ese Islam agresivo y colonialista, se alza otro Islam, moderado, humanista, social. Como el del Régimen de Siria o el defendido por Hezbollah y en cierta forma, Irán. La herencia de los Partidos Baath.

¿SOROS EN LATINOAMERICA?

La Migración en Latinoamérica, no es nueva. Tiene décadas. Pero también hubo migración de anglosajones a ésta. La primera oleada, fueron los que llegaron a Tejas, con apoyo de Poinsett y sus logias anglosajonas.

Posteriormente, los colonos tejanos declararon la independencia respecto a México.

Siguió la "migración", que en realidad fue guerra total, en 1847 y una política de intervención militar, económica, cultural y política de Estados Unidos contra las Patrias. Una de sus obras, fue la división de Gran Colombia en Colombia y Panamá.

Otra, invadieron Nicaragua varias veces, impusieron gobernantes a su antojo y arrasaron las economías locales con sus procesos industriales, desde cafeteros, a agrícolas, ganadería o pesca, siempre con empresas norteamericanas con un número dominable de funcionarios locales.

En éste escenario, Estados Unidos fomentó el uso de la mariguana y drogas como política de control de la juventud. Las sociedades latinoamericanas, suelen ser más moderadas, comunitarias, de un cristianismo muy diferente al burgués anglo sajón. Pues es un cristianismo de comunidad, social, de tradición familiar.

Quien crea que Soros está interesado en impulsar caravanas migrantes a Estados Unidos, está poco informado sobre lo que es la Sociedad Abierta de Soros.

¿ Quien fomenta el odio a los migrantes?

- Los Cárteles del Narcotráfico. Al fomentar el odio y el desprecio, aislan a miles de familias y pueden secuestrar, esclavizar y matar a placer.

- 7,000 Hondureños huyen de un gobierno corrupto que está en complicidad con Cárteles del Narco mexicano. Es obvio quien está interesado.

- Mientras 7,000 hondureños huyen, más de 120,000 mexicanos lo hacen cada año. A ver: huyen 7,000 de un tirano. 120,000 huyen de la violencia y la pobreza. Ambos latinoamericanos. usualmente católicos. Idénticos en lo cultural. Hasta en la apariencia física.

Pero también huyen de Venezuela, Cuba, Nicaragua. Gobiernos de Izquierda - en teoría-. Para los odiadores de izquierda, éstos son "gusanos", "burgueses".

Así vemos que la izquierda y la derecha no han resuelto graves problemas.

En todo caso, a Soros, le convendría una política de Sociedad Abierta, que es una forma de decir liberal, no moderada. No comunitaria. No católica.

A Soros no le interesa defender migrantes. Le interesa sostener el Capitalismo "democrático". Claro, con la ayuda de una "Izquierda" miope que cree que cualquier bandera es bandera digna.

Muy al contrario, que se incremente la población latinoamericana en Estados Unidos, con una cultura como la que exportan los pueblos, poco afecta al liberalismo yanqui, muy aguerrida, poco tolerante, muy participátiva y festiva, son de preocupación para su visión de Sociedad Abierta.

La Unidad de los Pueblos, la lucha que unifique luchas patrióticas y sociales, es justo lo que le preocupa.

Unidad con Honduras, El Salvador, Nicaragua, Guatemala, Costa Rica , México, es lo que nos va a salvar. Recuperaremos las Tierras del Norte ocupadas por los anglosajones.

Y reconstruiremos una Civilización acorde a una Cosmovisión comunitaria, social, espiritual.

Es lo que toca. Nos toca.

Aquí un fragmento más trabajado sobre la política de George Soros.

George Soros ha comprendido muy bien que la sociedad abierta popperiana se ha elevado hoy a un nuevo nivel de significación. Ya no se trata sólo de proteger la democracia contra la dictadura, al individuo frente a la tribu, la tolerancia contra la intolerancia. En nuestro tiempo, la batalla se libra en un plano mucho más profundo; y, en ese plano, la mente a la vez lúcida e inquietante de Soros ha comprendido que se impone, como exigencia histórica de nuestro tiempo, una disolución universal de todas las rigideces, de todos los contornos nítidos, de todas las esencias y de cualquier rastro de identidad.

En la controversia milenaria entre Heráclito y Parménides, podríamos decir que el archicapitalista Soros ha optado, sin ambages y apostándolo todo, por el primero. Ya en la década de 1990, en la disputa entre el posmoderno Richard Rorty y Umberto Eco, Rorty defendía una visión totalmente heracliteana y sofística del mundo –todo se mueve, todo es interpretable, no existe ninguna esencia fija ni en las cosas ni en los individuos–, mientras que el agnóstico Eco, honrando por una vez su formación de medievalista, reclamaba con energía los fueros de Parménides –no toda interpretación es válida, hay líneas rojas que intelectualmente no es lícito cruzar–. Pues bien: George Soros, alineándose con Rorty y con Foucault, ha llegado a la conclusión de que la sociedad abierta hoy debe ser entendida como sociedad amorfa. Carente de forma, carente de tradiciones, carente de identidad. Con unos individuos desarraigados de su historia y de toda religión –de modo eminente, del cristianismo–. Y ello como condición necesaria para el advenimiento de la Utopía definitiva: la implantación del Estado Global y del Nuevo Orden Mundial bajo unas premisas absolutamente neoliberales. Y no tanto para que el sistema financiero y las nuevas megacorporaciones digitales ganen aún más dinero –que también– cuanto para implantar un nuevo modelo social y nada menos que una nueva forma de entender al ser humano y el mundo.

Entendido lo anterior, se comprende fácilmente que, en el fondo, Soros pretende ir mucho más allá que Popper y, en realidad, en una dirección –no muy sutilmente totalitaria– que el propio Popper deploraría. Como es bien sabido, la Open Society Foundation de Soros trabaja contra Putin y contra el gobierno del húngaro Viktor Orban, a la vez que, en Europa occidental, financia a las feministas radicales de Femen y a movimientos LGTB y apoya la legalización del cannabis, el aborto, el matrimonio homosexual, la inmigración musulmana y la acogida de refugiados, la ideología de género, el inglés como lengua global, el animalismo, la interacción –también sexual– entre hombre y robot, la renta básica universal y la supresión del dinero físico. Todo ello como parte de la agenda globalista del Nuevo Orden Mundial, que busca debilitar y fragmentar Europa (no en vano, las fundaciones de Soros apoyan la independencia de Cataluña, dentro de una más amplia estrategia de balcanización de Europa), igual que hace unos años impulsaron la llamada Primavera Árabe y el Euromaidán en Ucrania. Se trata de un ambicioso proyecto de ingeniería social cuya estrategia, paciente, consiste en un avance progresivo, paso a paso.

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